El taro tiene una popularidad que aumenta cada día más y más, sobre todo en los postres de moda como el yogurt helado o el bubble tea. El taro tiene un delicado saborcito dulce y le da un atractivo color a la comida. Sin duda llama la atención porque la comida naturalmente morada no es de todos los días.
Aunque se trata de un ingrediente que cada vez está más presente en América, muchos no sabemos ni siquiera qué es el taro. ¿Es una fruta? ¿Es un concentrado de algo? ¿Es una criatura de otro planeta?
¿Qué es el taro?
El taro es un tubérculo como las papas y los camotes. La parte que se utiliza en los alimentos y que aporta ese distintivo color violeta es la raíz de la planta. Este vegetal cuenta con unas hojas en forma de corazón que también son comestibles. Pero ojo: comer taro —ya sea la raíz o las hojas— sin lavarlo y cocinarlo primero, puede ser tóxico.
El taro es originario del sudeste de Asia y una parte de la India, aunque su resistencia a las inundaciones ha permitido que este alimento se produzca en otras partes del mundo como Brasil y Hawaii. El color de este tubérculo depende de las propiedades del suelo en donde se cultive y puede ser blanco, rosa o morado.
¿Qué beneficios aporta el taro?
La raíz de taro es alta en fibra, lo cual ayuda a la digestión y previene que los niveles de glucosa en la sangre se disparen. Es una fuente alta de potasio, el cual ayuda a regular los procesos cardíacos como los latidos del corazón y la presión de las arterias. Incluso ayuda con problemas de anemia al promover la circulación de la sangre.
La vitamina C es un arma efectiva para evitar el cáncer y mantener nuestro sistema inmunológico en condiciones óptimas, y el taro es rico en este nutrimento.
¿El taro tiene algún efecto negativo?
Como mencionamos al principio del artículo, es tóxico comer taro sin ser lavado y hervido de manera adecuada. Esta intoxicación con taro se asocia con la irritación e hinchazón de la faringe y la boca.
Fuera de eso, el único problema serio que puede darte el taro es su alto contenido calórico y de carbohidratos. 100 gramos de taro cocinado tienen alrededor de 112 calorías. ¡Ahora imagínate en un helado de crema lleno de azúcar!
Una ingesta alta en carbohidratos de hecho es recomendable si eres un atleta o vas mucho al gimnasio porque estos te dan la energía que tu cuerpo necesita. Pero si tu estilo de vida es más bien sedentario y estás tratando de cuidar la dieta, comer demasiado taro y luego en postres, no es recomendable.
¿Tú en qué comidas has probado el taro? ¿Lo recomendarías?
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